Pautas y recomendaciones de la mano de la Dra. Irene Alias, pediatra del servicio de Pediatría de HLA Mediterráneo
Los pequeños de la casa son los más vulnerables a sufrir un accidente de este tipo porque, en la mayoría de los casos, dependen de los adultos para hidratarse y no son conscientes de los síntomas que les avisan. Las altas temperaturas son una de las mayores preocupaciones en las consultas cuando llega el verano, y frente al peligro de sufrir un golpe de calor, los niños son los más vulnerables.
“Esto se debe a que los mecanismos de regulación de la temperatura corporal de los más pequeños son menos eficaces, ya que sudan menos y además, casi siempre, dependen de terceras personas para hidratarse”, detalla la Dra. Irene Alias, pediatra del Servicio de Pediatría de HLA Mediterráneo y especifica que “estos no suelen tener sensación de sed hasta que la deshidratación está bastante avanzada, por eso es muy importante ofrecerles agua constantemente e instarlos a beber aunque no les apetezca”.
Además, los niños, en especial los menores de cuatro años, en la mayoría de los casos no perciben que están sufriendo un golpe de calor y desatienden los primeros síntomas. Por lo tanto, los adultos han de ser los que tienen que estar alerta a señales “como sequedad, calor y enrojecimiento de la piel, dolor de cabeza intenso, náuseas y vómitos, confusión, pérdida de conciencia, debilidad, agitación, convulsiones o síncopes”, afirma la especialista del centro del Grupo Hospitalario HLA.
Para prevenir cualquier tipo de accidente, la pediatra del centro almeriense recomienda “intentar que los más pequeños de la casa beban al menos un litro y medio de agua al día, además de incorporar a su dieta, con más empeño en esta época del año, frutas y verduras de temporada, ya que tienen una gran cantidad de agua. Un truco para conseguir que los niños tomen más fruta es disfrazarla en forma de helados caseros”.
Mucho cuidado, tanto dentro como fuera de casa
Prevenir, sin duda, es el mejor de los consejos. Y además de una nutritiva alimentación, hay que evitar en la medida de lo posible las altas temperaturas, es decir, salir a la playa, de excursión o a realizar deporte durante las horas centrales del día. Y si no es posible hacerlo, procurar vestir a los niños con ropa ligera de algodón y de colores claros que favorezca la transpiración, y protegerles siempre la cabeza, especialmente a los bebés.
Además de cumplir estas advertencias, también hay que seguir una serie de consejos en sitios cerrados, como “mantener una buena ventilación, y recurrir el aire acondicionado o al ventilador para hacer disminuir la temperatura dentro del hogar si fuera preciso”, tal como detalla la pediatra, y advierte que “aunque sea por corto tiempo, no debemos dejar a bebés y a niños en un vehículo estacionado y cerrado”.
Un cuidado que también se extiende a las aulas de las escuelas de verano o en los campamentos donde los niños pasan gran parte del tiempo en verano. Según la normativa vigente, estos lugares no han de rebasar nunca los 27º, ya que temperaturas más elevadas impiden a los niños concentrarse que pueden llegar a sufrir un golpe de calor.
“Por tanto, ante los primeros síntomas de que están sufriendo un golpe de calor, hay que actuar rápidamente e intentar bajarles la temperatura corporal con hielo o un baño en agua helada, ofrecer agua fresca, poner al niño en lugar refrigerado y ventilado, y por supuesto, consultar al médico o acercarse al centro de salud lo más pronto posible”, recomienda la Dra.Alias de HLA Mediterráneo.
Sobre HLA Grupo Hospitalario
El Grupo Hospitalario HLA está compuesto por 15 hospitales integrados con 27 centros médicos multiespecialidad y una red de unidades de referencia en tratamientos de última generación. 40 clínicas dentales, 8 unidades de reproducción asistida, 25 clínicas oftalmológicas dotadas de la más avanzada tecnología y 435 centros de análisis clínicos completan la estructura que HLA pone a disposición de sus pacientes. Con más de 1250 plazas de hospitalización HLA es un referente en la atención hospitalaria y ambulante. Más de 30 años de experiencia y presencia en seis países configuran un modelo de atención que basa su filosofía en el trato humano, la excelencia, el liderazgo, la responsabilidad y la especialización.
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